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• FUERTES EN VELOCIDAD Y DÉBILES EN DERECHOS SOCIALES

  2011-12-23
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  Hoy, día 23, el Parlamento Vasco va a aprobar los presupuestos del Gobierno Vasco para el año 2012. Mientras que se prevén recortes para la gran mayoría de las partidas, el Gobierno Vasco ha decidido aumentar en un 30% la destinada a la construcción de la Y vasca.

  

  Con el despliege de una gran pancarta en la fachada de la sede del gobierno en Lakua Mugitu!, movimiento que se sirve de la desobediencia para hacer frente a la imposición del Tren de Alta Velocidad, pretende denunciar este sinsentido, ya que a pesar de que el debate presupuestario tenga lugar en el parlamento es en este edificio donde se redactan los presupuestos.
  La crisis económica está teniendo importantes consecuencias en la vida diaria de la ciudadanía vasca. Nos hablan de la necesidad de apretarse el cinturón y a pesar de la creciente necesidad coberturas sociales los gobiernos están recortando en los ámbitos que constituyen los pilares del estado del bienestar. Sin embargo la partida presupuestaria destinada al TAV se espera que se incremente un 30%.
  Nos parece preocupante el orden de prioridades de este gobierno. ¿Es acaso más importante para el ejecutivo vasco acortar en media hora el trayecto entre capitales vascas que el garantizar una educación de calidad y una sanidad fuerte para todos los vascos y vascas?
  Recordemos que esa política de promover grandes infraestructuras sin que existan estudios sólidos que apoyen su necesidad y pertinencia ha sido sin duda uno de los factores que ha provocado la crisis que padecemos.
  El TAV es el símbolo de esas grandes infraestructuras y su modelo de gestión económica por necesidad obsoleto. Sin embargo, el Gobierno Vasco se empeña en creer en ese proyecto en contra de toda evidencia. El consejero Arriola dice que las obras están muy adelantadas por lo que el TAV es un proyecto irreversible pero la verdad es bien distinta ya que tan sólo se ha realizado el 20% de la obra.
  Se obstinan en creer en un tren que, en base a la información del Gobierno Vasco, sólo sería capaz de retirar 1% del transporte por carretera. Solo sirve para el movimiento entre capitales, lo cual supone únicamente el 0,7% de los desplazamientos diarios totales de la CAV. Por lo que será un tren utilizado por unos pocos pero pagado por todos nosotros. Concretamente, solo en su puesta en marcha se van a invertir casi 5000 euros por cada ciudadano de la CAV, eso sin tener en cuenta los gastos de mantenimiento. Por otro lado, no podemos olvidar los graves daños ecológicos que el TAV ya está causando y los desequilibrios territoriales debidos al desplazamiento de la población rural a las capitales que podría provocar.
  Si los presupuestos son en gran medida reflejo de nuestro modelo de sociedad, ¿qué tipo de sociedad estamos construyendo? ¿Es acaso un modelo de sociedad en el que los viajes a alta velocidad conviven con una educación, sanidad y servicios sociales precarios?
  Debemos de poner fin a este sinsentido de una vez por todas. ¿Pero cómo? Los que participamos en Mugitu! Ya lo tenemos claro: denunciando las injusticias, burlándonos de los poderosos pero ante todo con una actitud desobediente y con grandes dosis de humor e imaginación.Mugitu!Mugimendua

  23/12/2011

  
  

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