La Fiscalía ha sobreseído la denuncia que tanto Eguzki como la Diputación de Álava presentaron hace ya un año por el abatimiento por disparo de escopeta de un milano real en el coto de Zanbrana, lo que constituye un presunto delito contra la fauna que puede ser castigado incluso con penas de cárcel. La Fiscalía argumenta que, “a pesar de las diligencias practicadas y del completo informe pericial realizado en el que se concluye sin ningún género de dudas que el abatimiento del milano real fue de todo punto intencionado por alguien que se encontraba en el interior del coto, no es posible determinar la identidad del individuo en cuestión” y, por tanto, no puede seguir adelante.

Eguzki ha denunciado ante la Fiscalía un nuevo caso de especie protegida abatida por disparos de escopeta. Se trata de un azor hallado muerto el 13 de noviembre en la zona de Jaizubia, al pie de Jaizkibel. Es el quinto ejemplar de especie protegida abatido a tiros del que Eguzki tiene conocimiento en lo que va de temporada de caza. No es el quinto ejemplar de especie protegida abatido en lo que va de temporada, sino el quinto del que Eguzki tiene conocimiento. Y Eguzki tiene conocimiento solo de unos pocos. De hecho, recientemente hemos sabido que a Arrano Etxea llegaron el año pasado 33 aves tiroteadas, 21 de las cuales pertenecían a especies protegidas o no cinegéticas. Y hay que tener en cuenta que incluso la cantidad de ejemplares que llegan a Arrano Etxea no es más que la punta del iceberg del problema. Es decir, no se trata de “casos aislados”, sino de un problema crónico, al que la Diputación no le presta la atención debida.

Eguzki ha denunciado ante la Fiscalía que el pasado 27 de octubre fue abatido de una perdigonada un gavilán en la zona de Andatza, en el término municipal de Usurbil. Fue hallado en un balcón por un particular, quien lo trasladó a Arrano Etxea de Igeldo, pero el ave murió poco después. Esta rapaz se convierte así en el cuarto ejemplar (conocido) de especie protegida abatido por disparo de escopeta en el pasado mes de octubre.

Sospechamos que en los últimos años se han extendido más los puestos de caza por el monte Jaizkibel. No parece que el control a realizar sea riguroso y entendemos que es necesario conocer si la situación actual se ajusta a la normativa vigente. En este sentido, hemos visto que el visor disponible no ayuda mucho en el control que se debe realizar, ya que el contenido no se ajusta a las situación real, es decir, no está actualizado, ya que frecuentemente la ubicación exacta de los puestos de caza no coincide con la del visor, pudiendo variar los números.

La Diputación ha requerido la clausura temporal de varios puestos de caza en Jaizkibel, donde el domingo fue abatido un halcón peregrino. Se trata del tercer ejemplar (conocido) de especie protegida abatido por disparo de escopeta en lo que va de mes, pues, tal y como denunció Eguzki ante la Fiscalía, el 6 de octubre fue recogida en Errezil un águila calzada y el 16 en Segura un elanio azul. Eguzki celebra que la Diputación haya decidido abandonar la inacción ante un problema que no es puntual, sino crónico.

Eguzki ha denunciado ante la Fiscalía de Medio Ambiente que un elanio azul resultó herido por disparo de escopeta el 16 de octubre en el término municipal de Segura. En la actualidad, esta pequeña rapaz se recupera en el centro Arrano Etxea de Igeldo. Es el segundo caso de especie protegida abatida por disparo de escopeta que Eguzki denuncia este mes, pues el 6 de octubre fue recogida en Errezil un águila calzada, que murió al día siguiente. La denuncia presentada por el caso del elanio quiere servir también para esclarecer por qué no se denuncia este tipo de hechos desde la propia Diputación, como corresponde.

Eguzki ha denunciado ante la Fiscalía de Medio Ambiente la muerte por disparo de escopeta de un águila calzada en el término municipal de Errezil. El ejemplar fue hallado el 2 de octubre aún con vida y conducido a Arrano Etxea, en Igeldo, donde ha muerto el día 7. El águila calzada (Hieraaetus pennatus) es una especie incluida en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas en la categoría de “Raras”. Está, por tanto, protegida y su abatimiento por disparo puede constituir un delito contra la fauna castigado incluso con pena de cárcel. Sin embargo, el abatimiento por disparo de especies protegidas no es algo puntual, sino habitual, crónico. Y es evidente que las administraciones públicas, en este caso la Diputación, siguen sin tomar medidas para atajar el problema.

El Gobierno de Navarra ha asumido, por fin, la moratoria de la tórtola. Así se refleja en el proyecto de Orden Foral de Vedas para la temporada 2021-2022. Por tanto, salvo sorpresa de última hora, este año estará prohibido abatir tórtolas en los cielos de la Comunidad. Eguzki, que, como otras organizaciones ecologistas y naturalistas, lleva ya unos años reclamando proteger o, al menos, eliminar de la lista de especies cazables la tórtola, cuyas poblaciones han experimentado un retroceso espectacular en las últimas décadas, se congratula de la medida, claro, pero no tiene ningún reparo en denunciar que debería haber llegado antes.

Hoy se ha sabido que la Diputación de Araba y la Ertzaintza investigan la caza furtiva en el Parque Natural del Gorbeia. La noticia llega después de que haya aparecido un corzo decapitado colgado en un lugar significativo del parque, una muestra de la chulería y sentimiento de impunidad con que actúan los furtivos. Hay indicios de al menos otras tres piezas han sido también abatidas. Eguzki solicita medidas para acabar de una vez con la impunidad en la que actúan estos delincuentes.

La Diputación de Araba ha abierto un expediente disciplinario al guarda forestal Andoni Diaz. Andoni es muy conocido por su compromiso con el medio ambiente y hay razones sobradas para sospechar que el expediente es un castigo por haber denunciado irregularidades en la tramitación de los expedientes sancionadores contra cazadores. Es decir, un castigo por hacer bien su trabajo. Desde Eguzki, nuestra solidaridad.

Eguzki alerta de que la Diputación está tramitando una Orden Foral para autorizar batidas de jabalíes dentro de las zonas de seguridad, lo que desnaturalizaría gravemente la función de estas como espacios en los que, “para garantizar la protección de las personas y sus bienes”, “está prohibida la caza con armas”, tal y como se recoge en la Ley de Caza de 2011.

Eguzki denunciará ante la Fiscalía la muerte de un milano real por disparo en el coto de caza de Zanbrana. El milano real figura en el Catálogo Vasco de Especies Amenazadas en la categoría “En peligro de extinción”, la que corresponde a las especies que padecen una situación de mayor riesgo. La razón es que las poblaciones de milano real en Europa y, muy particularmente, en la península ibérica han experimentado en apenas una década un descenso espectacular. El abatimiento por disparo de especies protegidas –que, ojo, es un delito, que puede incluso estar penado con cárcel–, no es algo puntual, sino habitual, crónico. Y, en nuestra opinión, las administraciones públicas, en este caso la Diputación de Araba, no solo no atajan el problema sino que lo propician con sus políticas cinegéticas.

Queremos denunciar el poco caso que se hace desde la Administración al continuo ataque que sufre nuestra fauna protegida por parte de gente desalmada. Por mucho que se hable de especies protegidas, Urdaibai,…No existe conciencia para proteger estas especies que se encuentran ante un futuro muy incierto, y que necesitan de la ayuda de todos para su conservación. Como muestra de este desinterés, un botón. El 23 de Agosto, un baserritarra de Gatika tiroteo a una rapaz protegida como es el Aguila Calzada, porque dijo que atacaba a sus gallinas.

Eguzki reclama al Gobierno Vasco que aplique a la práctica cinegética las restricciones contenidas en el Decreto anti-Covid exactamente igual que al resto de actividades, y, por tanto, desoiga las peticiones en sentido contrario que le están haciendo desde instancias cazadoras. Concretamente,las federaciones de caza han solicitado “la libre circulación de cazadores en Euskadi” y la consideración de la caza como “actividad esencial”.

El Consejo de Estado francés ordenó ayer la suspensión inmediata del decreto del Ministerio de Transición Ecológica que autorizaba la caza de un cupo total de 17.460 tórtolas durante la temporada 2020-2021. La decisión afecta a todo el Estado francés y, por tanto, también a Lapurdi, Nafarroa Beherea y Zuberoa. Puesto que las diputaciones de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa ya prohibieron la caza de esta especie la temporada pasada, en Euskal Herria esta práctica solo sigue autorizándola el Gobierno de Navarra, que por tercer año consecutivo ha vuelto a ignorar la moratoria prevista en el Plan de Acción para la Conservación de la Tórtola impulsado por la Comisión Europea.