Un año después del accidente del Motxo seguimos sin saber qué pasó y las cicatrices de la operación se mantienen
2011-11-03
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El 4 de noviembre del 2010, el pesquero Motxo encallaba en el Biotopo Deba-Zumaia, a la altura de Elorriaga. Tras varias horas a merced de las olas y de la noche, al alba eran rescatados los arrantzales.
El barco permaneció encallado varios días sin que los intentos para reflotarlo tuvieran éxito.
El Motxo dio mucho que hablar, tanto por el propio lugar del naufragio, un espacio natural protegido, como por las distintas hipótesis que se barajaron acerca de las circunstancias por las que se encontraba en la zona.
Posteriormente, la recuperación del pesquero también ocupó los informativos, debido a la espectacularidad del método empleado para sacar el barco a tierra.
Un año después, desde Eguzki queremos denunciar que:
1.-Todavía no se han hecho públicos los datos de la “caja azul” del Motxo.
Tan pronto como se produjo el naufragio, numerosos organismos (Consejería de Pesca, por boca de la Sra. Unzalu, Fiscalía de Medio Ambiente de Gipuzkoa, Udalarrantz, Capitanía General de Pasaia…) manifestaron que era preciso investigar y aclarar las causas de la presencia del Motxo en aguas del Biotopo, puesto que la pesca está prohibida en esa zona a pesqueros como el Motxo.
Pues bien, a pesar de que ha transcurrido ya un año, desde los organismos responsables de velar por la protección de ese espacio y de regular y ordenar la pesca, el silencio es la única respuesta.
Por tanto, desde Eguzki demandamos que se hagan públicos de una vez los datos de la “caja azul” del Motxo y los resultados de la investigación o las investigaciones que se han debido realizar a lo largo del año.
2.-Las afecciones de la pista que se utilizó para sacar el Motxo siguen siendo enormes y, a pesar de las promesas, las labores de recuperación del terreno han tenido escaso resultado.
Como consecuencia de que para extraer el barco se optó por la alternativa “más pesada”, la pista, que en origen era prácticamente inapreciable, se amplió, generando una enorme “cicatriz” de entre 6 y 8 metros de ancho en pleno Biotopo (ver video).
Ante el escándalo suscitado por la ampliación de la pista, la Diputación se comprometió a restituir la zona a su estado inicial. Es patente que dicho compromiso ha sido incumplido, y la herida abierta con la pista todavía hoy es muy apreciable.
Por lo tanto, preguntamos a la actual Diputación si se da por satisfecha con los escasos resultados restauradores del equipo que le precedió, PNV y Hamaikabat, y, en caso de no ser así, qué medidas piensa adoptar para restañar la “cicatriz” que produjo la extracción del Motxo.
En resumen, demandamos información sobre qué hacía el Motxo esa noche en la rasa mareal de Deba-Zumaia y un mayor esfuerzo de recuperación para la zona agredida por la pista.
Desde Eguzki consideramos que el Biotopo Deba-Zumaia todavía está pagando las consecuencias de quienes hace un año tomaron la decisión errónea de sacar el pesquero mediante la utilización de la técnica “más pesada”, a diferencia de lo que sucedió en el caso del naufragio del Maro en Jaizkibel, cuyo desguace y extracción no generó secuelas como las del Motxo, a pesar de que era un barco seis veces más grande.
Esperamos que la actual Diputación y las siguientes extraigan enseñanzas de cara a futuros casos similares que puedan producirse.