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• Que esta sucediendo en nuestros montes?

  2020-09-04
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  Debido a la enfermedad del hongo marrón en los Pinos Radiata, en amplias zonas de Gipuzkoa y Bizkaia, se están talando pinos masivamente. Cientos de hectáreas. Con el grave impacto ecológico y paisajístico que ello conlleva. Zonas en las que no por casualidad, el porcentaje de arbolado aloctono es superior al 80 % del total.

   

  Un centímetro de suelo puede necesitar cientos de años para formarse; en consecuencia, es necesario protegerlo y prevenir la erosión. El uso de maquinaria pesada para la apertura de pistas en laderas de alta pendiente, esta conllevando grandes movimientos de terreno y  generando  flujos de agua que producen  graves procesos erosivos. Calculándose la erosión que se puede producir en los años posteriores, en unas 200 ton/hec/año.

   

  Hay que tener claro que el suelo es uno de los ecosistemas más complejos y alberga una cuarta parte de la biodiversidad.   En un solo m² de suelo forestal pueden encontrase más de 1000 especies de invertebrados. Asimismo, ayuda a combatir y adaptarse al cambio climático, jugando un papel clave en el ciclo del carbono a través de la captura de carbono y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero. De hecho, la mayor parte de carbono orgánico se almacena en los suelos. En la capa superficial del suelo es donde se encuentra la mayor parte de la materia orgánica, que es vital para la retención del aire, la humedad y los nutrientes.

   

  Además, los efectos de la erosión se agravarán en las próximas décadas con el cambio climático, que ya está acentuando los procesos de desertización en la península. Por lo tanto, es necesario apostar por un tipo de silvicultura que respete la fertilidad del suelo.

   

  El colmo es que como alternativa al Pinus Radiata, se está plantando eucaliptos. Que suponen una mayor amenaza para la biodiversidad, ya que es  una especie forestal exótica y de turno corto, unos 12 años, cuya gestión provoca daños y afecciones ambientales en suelos, en ecosistemas, en la fauna y en el paisaje, consumiendo mucha agua, y facilitando los incendios forestales. Además, su gestión intensiva exige matarrasas, originando erosión y pérdida de suelos.

   

  A pesar de los daños producidos por las plantaciones de eucaliptos y su gran incremento en número y superficie, a día de hoy las Diputaciones  no han elaborado ningún tipo de normativa que afronte esta problemática. Asimismo, tampoco existe ninguna planificación para eliminar este monocultivo de los terrenos públicos. Al contrario, las plantaciones de eucaliptos son subvencionadas al 100 %. Cuando en Portugal está prohibida su plantación, en Galicia se está limitando, e incluso a nivel del Estado los científicos han propuesto su inclusión como especie invasora.

   

  La destrucción de hábitats, su fragmentación y la introducción de especies invasoras  son tres de las principales amenazas para la biodiversidad de nuestros bosques autóctonos.

   

  La mayor parte de la superficie forestal del Monte Publico de Gipuzkoa y Bizkaia pertenece a los ayuntamientos, que normalmente ceden su gestión a la Diputación.

   

  Para hacer frente a esta situación, ¿Qué política habría que aplicar en Euskal Herria?

   

  Uno de los principales problemas es que la mayoría de los terrenos, sobre todo en Gipuzkoa y Bizkaia, son privados. Y los objetivos de los propietarios contrastan con el bien común.
  Los expertos piden que se dé información real sobre las plantaciones que se están realizando hoy en dia.

   

  Deberiamos replantearnos la forma de plantar, si de verdad es rentable o no. Con observar cómo se encuentran los montes, sería suficiente para replanteárnoslo.

   

  Hay que aumentar la superficie de bosque autóctono en el territorio. Garantizando su biodiversidad y aumentando la superficie que cumpla las funciones de conservación y recreo. Apostando por la producción de madera de calidad de especies autóctonas como robles, cerezos, castaños o hayas, que tienen un gran valor en el mercado.

   

  Por estos motivos proponemos como alternativa la Silvicultura o Gestión Próxima a la Naturaleza. Estableciendo líneas específicas de ayudas por parte de la Diputación de Bizkaia. Creando nuevas ayudas forestales para los terrenos privados, proporcionándoles los instrumentos y ayudas necesarias para fomentar una gestión forestal privada sostenible preservando la biodiversidad y evitando la erosión. La inversión de la Diputación Foral de Bizkaia se ha reducido en un 40% tras la crisis.

   

  Habría que incrementar y mejorar las ayudas a la conservación y regeneración del bosque de alto valor ecológico. Subvencionando técnicas de desembosque que no generen procesos erosivos en terrenos con pendientes superiores al 50-60% .

   

  Recuperando y manteniendo la vegetación de ribera: restaurando el bosque de ribera hasta los 20 metros a cada lado del cauce del río o arroyo.

   

  Así como restaurando el bosque de ribera desde los 5 metros actuales hasta los 8 metros a cada lado del cauce del río o arroyo en todos los terrenos privados. Pasando estos terrenos a ser terrenos de conservación.

   

  Estableciendo una línea de subvenciones destinadas a favorecer la creación de bosques autóctonos para organizaciones que se dediquen a la custodia de territorio o a actividades de sensibilización y educación medioambiental mediante voluntariado.

   

  Aparte de esto, desde EGUZKI pedimos a los propietarios de terrenos, que marginen a estas especies de árboles que son perjudiciales para el medioambiente, como es el eucalipto. Dejando de pensar únicamente en intereses económicos rápidos, y pensando un poco también en el interés general valorando el daño que pueden producir al medioambiente.

   

  Por otro lado, exigimos a las Diputaciones que abandonen la desastrosa política forestal que han llevado los últimos decenios, y que lo que ha estado en manos privadas del lobby del sector maderero  sea de nuevo revertido.

   

   

   

  
  

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