Noticia

  • Eguzki pone en evidencia la incoherencia de la iluminación navideña

    2020-12-03
    Partekatu - Compartelo

    La bola de la plaza de la Virgen Blanca, la novedad de este año.Foto: Diario de Noticias de Álava.

    La bola de la plaza de la Virgen Blanca, la novedad de este año.Foto: Diario de Noticias de Álava.

    Eguzki sigue poniendo en evidencia la incoherencia de la iluminación navideña.

    En concreto, en Donostia, hoy ha puesto en circulación un vídeo más que elocuente:

    https://youtu.be/IrTpGwXrHsY

    En Gasteiz, donde el acto inaugural de la iluminación navideña está previsto para mañana, Eguzki ha difundido la siguiente nota…

    Este viernes se encenderán luces por doquier en Vitoria-Gasteiz para incentivar el consumismo. El Ayuntamiento destinará a la iluminación navideña 165.000 euros, un 33% más que en 2019, en que el presupuesto ya aumentó un 50% sobre el año anterior. Y encima se vanagloria de ello.

    Como novedad este año el Ayuntamiento ha colocado en la plaza de la Virgen Blanca una gran bola de doce metros de altura y 7.000 vatios. Además de la bola de Navidad, Vitoria-Gasteiz contará este año con otra estructura luminosa en forma de pino en la plaza del Arca (el año pasado dijeron que simulaba un abeto).

    Se ha establecido una especie de campeonato sobre qué ayuntamiento es más “bruto” derrochando iluminación navideña (Vigo, Madrid…), y Vitoria -Gasteiz no es ajena a esta moda, sin pararse a pensar en las repercusiones ambientales y económicas de este proceder.

    A pesar de atravesar, también, una crisis ambiental que desde hace años lleva encendida la luz roja del calentamiento climático, los ayuntamientos actúan con total incoherencia en lo que respecta al derroche energético navideño y lo que ello conlleva.

    ¿Pero no habíamos quedado que la única energía que no contamina es la que no se consume? ¿Crisis climática?, ¿qué crisis? ¿Para qué atrasamos la hora en octubre con la excusa de ahorrar energía?, ¿para consumir más sin ton ni son en diciembre? ¿Qué tiene que ver esto con la sostenibilidad o con la economía circular?

    Es verdad que la iluminación navideña no es más que el chocolate del loro del consumo energético global, pero a veces este tipo de “detalles menores” sirven para poner en evidencia cuánto postureo hay en torno a estos temas.

    ¿Para qué sirven el Plan de Lucha contra el Cambio Climático 2010-2020? o el compromiso del “Pacto de los Alcaldes y Alcaldesas de Europa”, estableciendo para Vitoria-Gasteiz el objetivo de reducir la emisión de gases de efecto invernadero en un 25% para 2020, si luego se derrocha en el alumbrado navideño? ¿Qué coherencia hay entre apagar las luces del Ayuntamiento el Día del Planeta durante una hora como símbolo de compromiso si luego vemos lo contrario con el encendido navideño?

    Esta misma semana se anunciaba que el Ayuntamiento “prosigue a la cabeza de las ciudades del Estado en el nivel de cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible”. Pues bien, la iluminación navideña de Gasteiz deja en evidencia que hay mucho postureo en torno a la crisis climática y la sostenibilidad energética, a los títulos y medallas ambientales sin compromiso real, permanente y transversal.

    En 2011, el PSE denunciaba mediante una dura nota el coste total de la iluminación que instaló el equipo de Maroto, pues alcanzaba los 170.000 euros, y este año presumen de incentivar el comercio con dicha medida y coste. Este año, la concejala delegada de Promoción Económica, Empleo, Comercio y Turismo, y líder del PSE, busca la excusa del apoyo al comercio para hacer lo mismo que criticó en la oposición.

    Buscan reclamos y gastar energía en el consumismo, en vez de ser algo ecologista y merecer como Green Capital dar valor a la ciudad, a nuestro entorno, al premio de lo hecho y al comercio local, con vida en los barrios, animar a los comercios de proximidad, a toda la ciudad por igual, durante todo el año.

    Si el objetivo es animar las calles de la ciudad en un momento complicado, se debe invertir en un modelo que apueste por los comercios de barrio con ayudas según sus necesidades durante todo el año, por trabajar día a día por incentivar comercio de proximidad en vez de un centro comercial en el centro y zonas destacadas.

    Desde Eguzki solo nos queda solicitar al Ayuntamiento que al menos tenga la decencia de limitar el encendido de la iluminación navideña a las 9 de la noche –pues, de momento, todos los establecimientos deben estar cerrados para esa hora. Mientras tanto, el Ayuntamiento seguirá estando a “años luz” de la sostenibilidad energética.

    Eguzki, diciembre de 2020


    Partekatu - Compartelo