Cada vez se puede observar con más frecuencia en nuestro entorno la proliferación de todo tipo de plantas denominadas como de invasoras. En esta ocasión nos vamos a centrar en una en concreto. Más conocida entre la población seguramente por su vistosidad, que es la denominada como Plumero de la Pampa.
Debido a su capacidad de adaptación se reproduce con facilidad y está colonizando de forma imparable nuevas superficies que en muchos casos son especialmente sensibles como parques naturales, biotopos protegidos declarados, áreas recreativas, montes patrimoniales y de utilidad pública,…
La cortadeira selloana alcanza un desarrollo impresionante en condiciones no necesariamente optimas; un pie de planta puede alcanzar 3,5 metros de diámetro y 4 metro de altura con relativa facilidad. Cada penacho lleva más de cien mil semillas que pueden ser dispersadas por el viento hasta cerca de 30 km.
Además de la desfiguración paisajística, el problema específico de esta planta es que está reduciendo ya la diversidad biológica, al colonizar hábitats abiertos y establecerse en ellos como especie dominante.
Se propaga con especial celeridad en los taludes de las carreteras, debido que a que la semilla se disemina con mayor rapidez gracias a las corrientes de viento que provocan los vehículos al circular por ellas. Además, como especie oportunista que es, se deposita principalmente en terrenos anteriormente removidos.
Aunque Diputaciones y Gobierno Vasco llevan varios años actuando en zonas concretas, y de forma muy puntual. Creemos que hay que ampliar estas zonas a la totalidad de nuestro territorio, así como aumentar el ritmo de los trabajos de erradicación de esta planta invasora. Ya que es fácilmente comprobable que lejos de erradicarse, esta planta se está extendiendo de una forma muy alarmante.
Cuanto más tiempo perdamos en erradicarlas el coste económico y medioambiental será mucho mayor.
Por lo que solicitamos a todos los Ayuntamientos de Busturialdea, Lea Artibai y Mutriku que tomen las medidas pertinentes y a la mayor brevedad posible para acabar con la expansión de esta especie. Así como que lleve a cabo una campaña de divulgación entre la población en general y propietarios de terrenos particulares, para que también tomen conciencia del peligro que supone esta planta y conozcan cómo actuar para frenarla.
También pedimos a la ciudadanía que aunque estos plumeros sean bonitos como adorno, no se dejen engañar. Recordando que por ley está prohibido su transporte, posesión, y comercio. Así como que los propietarios de terrenos tienen la obligación de erradicarlos.
Cuando paseemos por el monte y nos encontremos con ejemplares de Plumeros, estaría bien que cortásemos los “penachos” y los metiéramos en una bolsa para no dispersar las semillas.
También ofrecemos toda nuestra colaboración en el caso que fuera necesario. Mientras seguiremos con nuestros Auzolanes, como este realizado en Ondarroa esta semana, pero teniendo en cuenta que son actuaciones concretas y que el principal fin es el de sensibilización.
EGUZKI
Auzolan
