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• Talan 2,5 hectáreas de bosque protegido en Donostia

  2017-05-09
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  La asociación naturalista Haritzalde ha denunciado la impresionante e inexplicable tala realizada en Donostia, en la zona de Lourdes Txiki, en una ladera situada detrás de la Ikastola Ekintza. Con la excusa de evitar ciertos desprendimientos se han eliminado casi 2,5 hectáreas de bosque protegido, con árboles centenarios. Si de verdad se trataba de evitar desprendimientos, no se podía haber actuado de forma más inadecuada, porque, al quedar ahora la ladera totalmente desprotegida, el riesgo ha aumentado. Es tan absurdo que resulta legítimo preguntarse si tras esta operación no hay segunda intenciones. El Ayuntamiento ha anunciado ahora la apertura de expediente, pero lo cierto es que está detrás del desaguisado.

  Haritzalde informa de que la tala abarca casi 2,5 ha; se ha abierto 1 km de pistas; el bosque estaba protegido; han talado robles centenarios; la ladera presenta ahora un elevado peligro de erosión y pérdida de suelo; han realizado los trabajos en plena época de reproducción de la fauna; alto impacto paisajístico, siendo apreciable desde la misma Concha. La zona dañada es terreno rural, no urbano, por lo que debía haber sido autorizada por la Diputación Foral de Gipuzkoa. Por tanto, carecían de los permisos correspondientes.

  La asociación considera al Ayuntamiento de Donostia el responsable directo de esta tala, pues fue el concejal de Urbanismo, Enrique Ramos, quien envió a los propietarios de los terrenos la orden de cortar todo el arbolado en una franja de “unos 50 m”, al parecer sin tener en cuenta la normativa de protección y sin advertir a los propietarios de sus obligaciones legales para ejecutar la orden. Tampoco se previó el seguimiento y la vigilancia de los trabajos.

  Haritzalde se pregunta: ¿El Ayuntamiento y los propietarios han actuado de manera irresponsable? ¿Es cuestión de incompetencia y desidia? ¿O tenemos que empezar a elucubrar sobre teorías conspiratorias?Que los actores implicados sean el Ayuntamiento, BBVA y la empresaSociedad de Ingeniería, Desarrollos Urbanísticos y Promociones S.L,no ayuda demasiado en pensar en negligencias. Aunque incluso en ese caso los hechos son enormemente graves.

   

  
  

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