Bilbao sigue su imparable andadura hacia su transformación urbanística. Esta vez, el consistorio bilbaíno ha puesto el foco en la zona de Zorrozaurre. En el no tan lejano pasado, en esta zona se ubicaba el barrio Euskalduna, que hicieron desaparecer, abriendo el canal de Deusto, aunque no totalmente, dejando unida a la tierra la península de Zorrozaurre. Finalmente, han dado el paso de abrir completamente dicho canal, pasando esa península a convertirse en una isla en medio de la ría del Ibaizabal.

La razón que ha llevado a los/as regidores/as de la villa a dar este paso es que  existe un mega-proyecto. Al parecer, se pretende construir el nuevo ensanche de Bilbao en esta zona: casas nuevas (unas 5.500 según los últimos datos), con sus jardines y zonas de esparcimiento. Pero, ¿cuáles son los impactos de este proyecto? Enumeremos los más importantes:

–        Riesgo de inundaciones, asociadas a aumentos puntuales en el caudal de la ría a su paso por la zona.

–        Aumento del tráfico rodado, en especial de vehículos privados, de los/as propios/as vecinos/as. Este aumento viene acompañado de; colapso circulatorio, emisiones de gases contaminantes y ruido. Lo que es lo mismo, disminución de la calidad del aire, aumento del efecto isla de la calor y contaminación acústica.

–        Privatización de un espacio que debiera ser para uso y disfrute de todos/as los/as habitantes.

Así, desde Eguzki proponemos un proyecto alternativo; un espacio verde, un pequeño bosquete en el que la “renaturalización” de la zona sea el eje principal. No es difícil imaginar cuales son los beneficios de contactar con un oasis natural en las ciudades:

• Aumento de la calidad del aire, debido a la absorción del CO₂ atmosférico y al aporte de oxígeno de los árboles, arbustos, etc.
• La vegetación, en especial los árboles, regulación de los ciclos hídricos. Los bosques son capaces de guardar el agua de lluvia, haciendo que ésta pase a la tierra. Además, disminuyen la velocidad del agua y como sujetan la tierra,  minimizan la erosión y con ello el riesgo de inundaciones.
• Influyen en el clima, ya que el 50% de la humedad del aire en las zonas continentales proviene de la transpiración de las hojas de las plantas.
• Proporcionan espacios de ocio y esparcimiento para las personas.
• Mejora de la calidad de vida de los/as ciudadanos/as. Reduciendo el riesgo de enfermedades respiratorias asociadas a la mala calidad del aire.

Desde Eguzki creemos que estamos a tiempo de redirigir este proyecto, dejando a un lado los beneficios económicos y apostando por una reconversión urbana en la que la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático sean tenidas en cuenta.

Bizkaian, 2020ko otsailaren 19an

Eguzki Talde Ekologista