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• Sí al reciclaje, no al postureo ni a tomar el pelo a la ciudadanía: ¡que se conciencien ellos!

  2021-07-26
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  En Donostia se multiplican las campañas y “performances” de todo tipo, impulsadas por instituciones oficiales y paraoficiales, orientadas a “concienciar” a la ciudadanía de que tiene que reciclar más.

  En Donostia, los primeros que tienen que concienciarse son los mandatarios municipales, con Eneko Goia a la cabeza. Lo demás es postureo, hacer como si se hace pero sin hacer. Greenwashing, que se dice ahora.

  La Mancomunidad de San Marko acaba de publicar (1) los datos correspondientes a la recogida selectiva en 2020, que hablan por sí mismos:

  PRIMERA CONCLUSIÓN: Donostia es, un año más, el municipio de la Mancomunidad que menos recicla y, además, con diferencia. Baste pensar que en 2020 recogió selectivamente el 43% de los residuos, cuando la media es del 52%. Pero es que, además, hay que tener en cuenta que San Marko, muy lastrada por la propia Donostia y también por Lasarte-Oria, es la mancomunidad de Gipuzkoa que menos residuos recoge selectivamente. De hecho, la media de Gipuzkoa alcanza el 57,98%. Es decir, CASI QUINCE PUNTOS SEPARAN EL PORCENTAJE DE DONOSTIA DEL DE GIPUZKOA. Pero, ojo, que si no es aún mayor de quince puntos es precisamente porque San Marko (o sea, Donostia) y alguna otra mancomunidad lastran la media guipuzcoana muy considerablemente. Baste pensar que Urola Erdia, Urola Kosta, Tolosaldea, Sasieta y Debagoeiena superan muy holgadamente ese porcentaje medio del 57,98%. Y este bajísimo porcentaje de recogida selectiva de Donostia no es nuevo, viene sucediendo año tras año. Normal: como decía Einstein, no esperes resultados diferentes si siempre haces lo mismo. Y el gobierno municipal de Donostia viene decidiendo expresamente año tras año seguir haciendo lo mismo, o sea, reciclar lo menos posible.

  

  Bonita campaña municipal, pero cuando tu porcentaje de recogida selectiva es del 43%…

  SEGUNDA CONCLUSIÓN: no es una cuestión de voluntarismo, “de concienciación”, a ver si la ciudadanía se anima a hacerlo un poco mejor. No hay ninguna razón para pensar que en Donostia tengamos ni más ni menos conciencia ecológica que el resto de los guipuzcoanos. Los hechos demuestran que en los municipios en los que se han implantado sistemas de recogida eficaces, INDEPENDIENTEMENTE DE SU COLOR POLÍTICO, obtienen buenos resultados. ¿Por qué, si no, cuando un municipio ha tomado medidas efectivas su porcentaje de reciclaje ha subido de un día para otro, por ejemplo, del 40 al 60%? ¿Es que acaso debemos interpretar que el nivel de conciencia de los vecinos de ese municipio ha crecido de la noche a la mañana un 20%? Para nada, la conciencia es imprescindible, qué duda cabe, pero lo que determina el porcentaje de recogida selectiva es la efectividad del sistema establecido. Y eso es responsabilidad del Ayuntamiento.

  

  Reciclos, otra campaña, con crowfunding incluido que te permite colaborar, por ejemplo, en limpiar los residuos del tiro al plato de Ulia, los mismo que el Ayuntamiento lleva décadas sin retirar. Qué gran idea, ¿eh?

  TERCERA CONCLUSIÓN: así las cosas, no podemos dejar de interpretar todas estas campañas institucionales o parainstitucionales “de concienciación” como un intento CÍNICO de lavado de cara. Por una parte, las instituciones hacen como que hacen y, por otra, transfieren a la ciudadanía la responsabilidad de que Donostia no recicle lo que debe, aduciendo que, por lo visto, no está suficientemente concienciada. Cuando, en realidad, si el municipio está a la cola del reciclaje es porque el gobierno municipal, EXPRESAMENTE, así lo ha decidido.

  CUARTA Y ÚLTIMA CONCLUSIÓN: lo que tiene que hacer el Ayuntamiento es dejarse de postureo. ¡QUE SE CONCIENCIEN ELLOS!

  EGUZKI, julio de 2021
  

  (1)            Sí, San Marko ha plublicado los datos de 2020 en su web este mismo mes de julio.

  

  Esta campaña la presentó el Gobierno Vasco la semana pasada en la Kontxa. “En Euskadi reciclamos muchos y reciclamos bien. ¡Sigamos así!”. Sí, sobre todo en Donostia. Pura propaganda autocomplaciente.

  
  

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