Noticia

  • Eguzki reclama más información y participación en Araba ante el riesgo de emergencia química.

    2021-11-22
    Partekatu - Compartelo

    5f9b0d460ca73

    El próximo martes día 23 de noviembre de 2021, a las 10:00 se activarán las sirenas de emergencia química en Lantarón. El objetivo de este simulacro es familiarizar a la población a este sistema de alarmas ante los posibles accidentes con fuga tóxica que se puedan producir en las industrias químicas afectadas por la normativa SEVESO que regula la prevención de accidentes graves en los que intervienen sustancias peligrosas.

    El Departamento de Seguridad cuenta con un Plan de Emergencia Exterior donde se establece la organización y los mecanismos de coordinación de los recursos humanos y materiales en caso de emergencia que tengan repercusión en el exterior de la fábrica. También incluye la forma de alertar a la población con avisos por megafonía y comunicados en medios de prensa y redes sociales.

    Más de una docena de empresas en la CAVP tienen un plan de emergencia química con riesgo de toxicidad ante la posibilidad de que se produzcan accidentes con nube tóxica incluida que puedan afectar a las poblaciones cercanas a las empresas. Entre estas empresas están Petronor en Muskiz, Electroquímica Hernani en la localidad guipuzcoana de Dekitra, General Química y Hexion en Lantaron, en Álava, y unas ocho compañías situadas en el Puerto de Bilbao, en la zona de Santurtzi, Getxo, Portugalete y Zierbena,

    Todas ellas por normativa disponen de un sistema de sirenas para alertar a los vecinos de la posibilidad de nube tóxica, que conlleva la recomendación a los ciudadanos de confinarse en sus casas para evitar la inhalación de los gases que puedan desprenderse y cuyas consecuencias puede ser muy graves.

    El departamento de Interior a través del área de Riesgos y Emergencias del Gobierno vasco tiene coordinados planes específicos con todas las empresas con riesgo químico según sus características.

    Estos planes a la carta para cada empresa permiten, al menos en la teoría, que, en el caso de que se produjera un accidente, cada uno de los medios movilizados desde emergencias, Bomberos, ambulancias de Osakidetza, Ertzaintza o Policía Locales saben desde el primer momento qué es lo que deben hacer y dónde colocarse en cada momento para ser más efectivos. También están especificados el número de medios que tienen que trasladarse al lugar en función del tipo de accidente que se produzca y su nivel de gravedad.

    Si bien el departamento de Seguridad afirma realizar cada seis meses simulacros de activación de las alarmas por toxicidad en el aire para que la población sepa cuál es el sonido que debe llevarlos a confinarse en sus casas en caso de accidente, para Eguzki y la mayoría de los vecinos que viven en las proximidades de las plantas estos simulacros no son suficientes.

    Ante ello, Eguzki quiere recordar que en Lantaron, Berantevilla, Rivabellosa y Miranda hay una gran acumulación de empresas peligrosas, y que se sitúa al lado del río Ebro, en zona LIC, sometida a planes de gestión para la protección de especies animales en peligro y con el añadido del riesgo del mejillón cebra,  que se multiplica mejor en aguas calientes.

    En esta zona se deben adoptar medidores a tiempo real de las inmisiones de partículas, SO2 y NOx para garantizar respirar aire limpio y sin riesgos para la salud pues es un derecho conocer el grado de cumplimiento de la normativa sobre la calidad del aire en el entorno de los grandes centros industriales de nuestra comunidad.

    Las grandes industrias, que constituyen grandes focos de contaminación atmosférica disponen de su propia red, ubicada en su entorno, esta obligación viene recogida en el Artículo 73 del Decreto 833/1975; y en particular, para determinadas centrales térmicas, la Orden de 25 de Junio de 1984 las obliga a instalar en su entorno una red de sensores para medida de las inmisiones de partículas, SO2 y NOx y son responsables de su mantenimiento y de la recogida de datos, datos que son entregados de una forma tan dispersa e inmanejable que dificulta enormemente todo tratamiento posterior. El hecho de que sean las empresas las que decidan en qué momento activar las alarmas no tranquiliza a Eguzki

    Eguzki ekologista taldea pide más información a la población por emergencia química porque, la mayoría de quienes viven en la zona de influencia de una planta química, como es el caso de valles en el entorno de Lantarón y Miranda, desconocen qué hacer si se produce un accidente.

    A juicio de Eguzki hay que difundir más los planes de emergencia, y concienciar sobre las plantas existentes, sus productos, efectos en caso de escape o contaminación del aire, y medias de autoprotección. Los Planes de Emergencia deben determinar la colaboración entre industrial y población, al objeto de asegurar que las personas que puedan verse afectadas reciban la información sobre el riesgo a que están expuestos, los sistemas de aviso establecidos, las medidas de seguridad que debe tomar y sobre el procedimiento a adoptar en caso de accidente.

    Eguzki también propone repartir por los hogares de la ciudad carteles informativos de las señales de emergencia, que se pudieran enganchar detrás de las puertas las casas.

    Eguzki considera que nos encontramos ante un «polvorín químico» situado en el polígono junto a la citada localidad. Ante un hipotético accidente químico industrial es necesario que la población tenga conocimiento de los procedimientos que se pueden derivar del mismo, como el confinamiento en domicilios y las medidas de autoprotección a adoptar, el alejamiento de la población por medios propios o la evacuación. También es fundamental tener conocimiento de las distintas alarmas sonoras que se activarían en ese caso.

    Gasteiz a 21 de noviembre de 2021.

    descarga

     


    Partekatu - Compartelo