El domingo, 27.000 corredores desafiaron al mal tiempo y recorrieron los 22km. que separan Beobia de Donostia. Miles de fotografías recogen el esfuerzo de esas personas pero lo que no se ha recogido es el el impacto ambiental , en lo que se refiere a residuos, de este tipo de eventos multitudinarios.
Desde Eguzki ofrecemos una galería de imágenes con residuos abandonados por doquier, un ejemplo de lo que no se debe de hacer.
Sabemos que hay corredores respetuosos y concienciados con el destino de los residuos que generan, pero por desgracia la mayoría no.
Latas, botellínes de plástico, manzanas, ponchos, bolsas, zapatillas .. y un sin fin de residuos abandonados en el suelo.
Pero la responsabilidad no es únicamente de esos corredores.
En cualquier rincón aparecían residuos de los participantes de la Behobia.
Los organizadores tienen una responsabilidad aún mayor y nos referimos tanto al Ayuntam. de Donostia como al club Fortuna, así como a las marcas comerciales que se «promocionan» regalando envases de usar y tirar.
Avituallamiento para los participantes… Con envases no reutilizables, de usar y tirar.
Urge una reflexión seria y profunda de cara a la edición del 2020.
Contenedor marrón, de orgánico. ¿Y el orgánico? ¿Dónde esta?
El Ayuntamiento de Donostia dice pretender ser una ciudad libre de bolsas de plástico, y en un solo día permite regalar 30.000 kilos de productos para usar y tirar. Vaya ejemplo!
Kit que la organización reparte a los participantes.
En la maratón ocurre algo similar.
El espectáculo que ofrecían las calles tras la maratón era lamentable.