Eguzki reclama a las diputaciones que actúen contra la comercialización ilegal de becadas, tórtolas y malvices
2018-10-30
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Normalmente las aves comercializadas ilegalmente suelen ser becadas, zorzales y tórtolas, pero también pueden ser agachadizas, como muestra la foto.
Eguzki ha puesto en conocimiento de las diputaciones de Bizkaia y Gipuzkoa sendos casos de presunta comercialización ilegal de piezas de caza, que sobre todo suelen ser becadas, tórtolas y malvices. Estos dos casos son los primeros de la temporada, pero seguramente no serán los últimos. Al finalizar la pasada, el número de casos superó ampliamente la docena.
Las órdenes forales por las que se fijan los periodos hábiles y condiciones generales de caza en cada uno de los territorios históricos permiten la captura de especies como la becada, la tórtola o las malvices, pero las excluyen de la comercialización.
Se trata de una prohibición que se repite temporada tras temporada desde hace muchos años, a pesar de lo cual se siguen comercializando estas aves y no siempre de tapadillo, sino a veces públicamente, incluso por internet.
El caso que Eguzki acaba de denunciar en Bizkaia, por ejemplo, corresponde a una página web (http://www.orozkaza.org/) que ofrece “sordas, malvices y becacinas”, es decir, becadas, zorzales y agachadizas, no incluidas en la lista de especies cinegéticas comercializables en la orden de vedas. Y, por lo que puede leerse en la propia página, parece que pocas dudas puede haber de que los responsables son plenamente conscientes de ello:
Buena parte de los casos de los que informamos a las diputaciones la temporada pasada correspondían a restaurantes. Algunos muy conocidos. Por ejemplo, el Bodegón Alejandro de Donostia informaba en su propia web de que su carta incluía tórtolas, y el Matxete de Gasteiz, becadas.
Un pantallazo sacado el año pasado por estas fechas directamente de la web del Alejandro.
En el menú del Matxete ofrecían becadas, abiertamente, sin disimulo.
Otras veces eran los propios chefs quienes en entrevistas y publirreportajes hablaban de esta comercialización ilegal con absoluta naturalidad, como en el caso del Zuberoa de Oiartzun o el Boroa de Zornotza.
Este texto sobre el Zuberoa está extraído de esta página: https://www.google.es/amp/s/amp.expansion.com/directivos/estilo-vida/rincones-gastronomicos/2017/10/14/59e13f1d268e3e83148b459a.html
Este otro, que corresponde al Boroa, de esta entrevista: http://www.elcorreo.com/revistas/jantour/boroa-cocina-afecto-20170907155549-nt.html
Nos consta que, a raíz de nuestras denuncias, las diputaciones han pegado “un toque” al menos a algunos de estos establecimientos, aunque no que hayan impuesto sanciones. De hecho, este año ya no hemos detectado la existencia de especies cinegéticas prohibidas en las cartas del Alejandro y el Matxete. En el caso de Navarra, sí que la Policía Foral ha abierto en los últimos años expedientes sancionadores, como puede verse en este enlace:
El hecho de que buena parte de los casos detectados la temporada pasada correspondieran a restaurantes muy conocidos no debe llevarnos a deducir que la comercialización ilegal de estas especies se realiza solo en ese tipo de establecimientos. Ello probablemente se debe a que, al ser los más mediáticos, es más fácil seguirles la pista, también por internet. Pero este tipo de comercialización no se limita, ni mucho menos, a los establecimientos, digamos, de postín. En ese sentido, creemos que los casos denunciados, sean de restaurantes conocidos o no, no pueden considerarse sino como la punta del iceberg del problema.
Por otra parte, que después de tantos años de prohibición se sigan comercializando estas especies y se haga además con tanta “naturalidad”, habla bien a las claras de una sensación de impunidad.
Antes de terminar, dos consideraciones:
La comercialización ilegal se nutre en muchísimas ocasiones de la caza furtiva, sobre todo en el caso de la becada y la tórtola, que no hace sino agudizar la difícil situación en la que ambas especies se encuentran.
Puesto que la compra-venta de piezas de caza no comercializables es ilegal, además de ser obviamente perjudicial para la supervivencia de las especies afectadas, cabe como mínimo dudar también de que se estén ofreciendo con las debidas garantías sanitarias.