Las organizaciones conservacionistas vascas SEO/BirdLife, Itsas Enara, Instituto Alavés de la Naturaleza, Izate, Eguzki, exigen un plan de gestión de la bahía de Txingudi
2010-02-26
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Las organizaciones conservacionista exigen al Gobierno Vasco la aprobación de un plan de gestión de la bahía de Txingudi en el que se tenga en cuenta a todos los sectores sociales pero que cumpla con los requisitos de conservación impuestos por la Ley de Patrimonio
Los conservacionistas ofrecen su ayuda y apoyo con la condición que el Gobierno Vasco y los ayuntamientos muestren una sincera intención de cumplir con la Ley, abandonando el obstruccionismo a estas iniciativas .
La reciente polémica sobre la colocación de luminarias en el acceso a las instalaciones deportivas no es más que una acción más de las muchas que las administraciones han llevado a cabo en los últimos años y que degradan es espacio protegido. Sin embargo, según la Directiva de Aves y la de Hábitats estas actuaciones lejos de ser aceptables obligan a tomar medidas para mejorar el lugar. Además, la Ley 42/2007 de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad obliga a aprobar antes de que finalice 2010 un Plan de Gestión del espacio que cuente con objetivos concretos de conservación.
Los grupos conservacionistas creen que esta es la oportunidad para iniciar la recuperación de la bahía para la naturaleza y para los ciudadanos. Y por ello, exige a las administraciones que cumplan con su deber y que, con la ayuda de todos, hagan que los vascos puedan sentirse orgullosos de contar con uno de los humedales más importantes en la migración de las aves europeas.
Por ello, las organizaciones conservacionistas exigen la elaboración de un Plan de Gestión urgente que cumpla con las siguientes condiciones:
1) Que el procedimiento de redacción sea participativo con el objeto de compatibilizar al máximo las inquietudes de todos los ciudadanos.
2) Que tenga unos objetivos de conservación claros y medidas concretas a llevar a cabo
3) Que contemple la recuperación urgente de la bahía para el espacio natural retirando por ejemplo las instalaciones deportivas de Plaiaundi y que quede claramente indicado los plazos en los que se hará.
4) Que se base en criterios científicos.
5) Que cuente con el consenso de todas las administraciones implicadas.
En una situación como esta, donde no se hace más que exigir el cumplimiento de la Ley, las organizaciones conservacionistas se comprometen a colaborar para una mejor conservación del lugar. De otro modo, las organizaciones se verán abocadas a denunciar ante la Comisión Europea el mal estado de conservación del lugar y la falta de medidas concretas de gestión como ya ocurrió con las Marismas de Santoña que terminaron con una Sentencia del Tribunal de Luxemburgo contra Cantabria y el Ayuntamiento de Santoña.
Existen casos emblemáticos cerca de Euskadi que demuestran que desde los ayuntamientos se puede restaurar humedales para el disfrute de sus ciudadanos y para cumplir con la legislación de conservación de la naturaleza.
SEO/BirdLife, Instituto Alavés de la Naturaleza, Itsas Enara, Izate, Eguzki,