Eguzki denuncia que el Ayuntamiento de Donostia será promotor taurino también en 2010
2010-03-02
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El Ayuntamiento de Donostia ha vuelto a adjudicar a Chopera el complejo de Ilunbe para que organice corridas de toros en la Aste Nagusia 2010.
Y, “asombrosamente”, lo ha hecho por la misma módica cantidad que el año pasado, 10.100 euros (más el IPC). Eso sí, esta vez, sin concurso público ni nada (¿para qué?). De modo que Odón Elorza y su Corporación ejercerán, una vez más, como promotores taurinos, esa actividad tan propia de una ciudad que aspira a la capitalidad europea de la cultura. Que no nos vengan diciendo que ellos se limitan a alquilar el complejo, porque no lo hacen para que en él pueda tener lugar cualquier tipo de actividad lúdica o cultural, sino con la condición expresa de que sea utilizado para matar toros, tal y como la propuesta que Eguzki hizo el año pasado dejó en evidencia. Recordamos que Eguzki se comprometió a abonar 10.101 euros, 1 más que Chopera, a cambio de poder disponer de Ilunbe durante la Aste Nagusia, con la particularidad de que nosotros no utilizaríamos el complejo para matar toros. La respuesta del Ayuntamiento, por boca del concejal de Urbanismo, Jorge Letamendia, fue diáfana: no, porque el arriendo llevaba aparejado el compromiso ineludible de organizar corridas. Y la empresa beneficiaria de un arriendo para matar toros a tan módico precio vuelve a ser Chopera, la misma que ha estado enredada en el complejo (chanchullo) de Ilunbe desde el principio; la misma con la que el Ayuntamiento, después de que los jueces declararan ilegal la concesión, apañó un convenio de reconcesión. Un convenio que, a pesar de estar hecho como un traje a medida de la empresa, ésta rechazó en el último momento, eso sí, percibiendo de las arcas municipales la suculenta cifra de… ¡21 millones de euros! Sí, Chopera, la misma empresa con la que, todavía después de aquello, el alcalde ha mantenido públicos rifirrafes, porque reclama 8 millones más de las arcas municipales. Frente a estas cantidades, los 64.000 euros anuales que el Ayuntamiento ha adjudicado recientemente para la limpieza del recinto pueden parecer pura calderilla, pero, qué duda cabe, son también un pico. Algún día habrá que hacer los cálculos sobre lo que esta plaza de toros, que, según el alcalde, no iba a costar un duro a los donostiarras, ha costado realmente. Incluidos los intereses de los créditos que el Ayuntamiento ha tenido que asumir para pagar parte de los 21 millones antedichos. Pero parece que habrá que esperar un poco a que ese día llegue, porque, al menos hoy por hoy, no parece que ni uno solo de los concejales de la Corporación esté por la labor. Resulta incluso sorprendente que ninguno de ellos diga nada sobre un escándalo de esta magnitud. En fin, no por eso nosotros vamos a dejar de denunciar el complejo (chanchullo) de Ilunbe. Donostiako EGUZKI