Europa aldean frackinga arautu nahi dute ingurunean sortzen dituen kalteak gutxitze aldera
2015-11-15
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Iturria: teinteresa.
Representantes del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) participarán en el proyecto europeo ‘FracRisk’ con el fin de evaluar el riesgo de la extracción de gas mediante ‘fracking’ o fractura hidráulica, un método de extracción de gas y petróleo de formaciones muy poco permeables en el que se emplea la inyección de grandes cantidades de agua y productos químicos, lo cual ha sido objeto de debate público.
El principal reto de la investigación es abordar las preocupaciones ambientales relacionadas con este método de extracción, en particular a través de un mejor conocimiento y control del proceso de fracturación y sus efectos ambientales, y ofrecer datos para el desarrollo de una normativa.
“A partir de los resultados que se obtengan, se pretende desarrollar una normativa que permita prevenir y mitigar el impacto potencial de la exploración y explotación de las reservas de ‘gas de esquistos’ en Europa ya que, en la actualidad, la regulación para el ‘fracking’ es la que se aplica a explotaciones tradicionales de hidrocarburos, que no es adecuada para la extracción no convencional”, explicó Jesús Carrera, investigador del CSIC en el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua y coordinador del proyecto ‘FracRisk’ en España.
‘FracRisk’ ampliará la base de conocimientos disponible sobre esta técnica partiendo de la experiencia internacional, del conocimiento de los procesos de rotura de la roca, del transporte de contaminantes y de su modelación. Para ello, prevé recopilar datos, desarrollar modelos, identificar y evaluar los impactos y riesgos de las diferentes técnicas de exploración y explotación del medio ambiente, y establecer recomendaciones científicas para las mejores prácticas.
Este proyecto europeo, en el que intervienen una decena de instituciones académicas, se centra en los procesos sobre los que existe mayor incertidumbre. En concreto, se han seleccionado y definido seis posibles escenarios de fuga de agua con compuestos contaminantes como los de máximo riesgo: fugas a través del pozo de extracción, a través de pozos abandonados, difusión a largo plazo, fugas por fallas naturales no cartografiadas o por fallas generadas por la fracturación hidráulica, y por microsismicidad.
Los investigadores emplearán un enfoque repetitivo de modelación y técnicas de reducción de riesgo para identificar las actividades más peligrosas y definir la base científica sobre la que basar decisiones. El conocimiento desarrollado se validará con los datos disponibles, tanto en Estados Unidos como en Europa.
‘FracRisk’ será desarrollado hasta junio de 2018 por un consorcio de más de una decena de instituciones académicas europeas coordinadas por la Universidad de Edimburgo. El proyecto cuenta con un presupuesto de tres millones de euros.