Ante la reciente sentencia del TSJPV en la que reconoce que el Ayuntamiento de Donostia puede negarse a alquilar Illunbe para realizar matanzas de toros, Eguzki considera que a la actual corporación se le han acabado las excusas para permitir este tipo de espectáculos en Illunbe.
La sentencia dice que es legal no alquilar el recinto multiusos de Illunbe para espectáculos taurinos y que el Ayuntamiento es soberano para destinarlo a cualquier otro fin.
Pero es que el clamor ciudadano para que en Illunbe no se derrame sangre animal como espectáculo es una constante:
– La última Encuesta de Percepción Ciudadana (setiembre de 2017) recogía que un 71% de l@s donostiarras no quiere que se destinen instalaciones municipales para las corridas.
– Una cantidad significativamente muy similar a aquella otra encuesta municipal de 1993, que cifraba en un 72% el número de los que se mostraban contrarios a las corridas en Donostia.
– En aquellas fechas, 13.000 firmas se presentaron al alcalde, de entonces, solicitando que no apoyase la construcción de una plaza para matar toros. Aquella plaza que no iba a costar “un duro” a los donostiarras y que, por cierto, terminó dejando un agujero de 20 millones de euros en las arcas municipales, tras una sentencia que el Tribunal Supremo dio a conocer en 2002.
– Esta misma legislatura, la plataforma Donostia Antitaurina Orain! presentó 10.000 firmas de donostiarras debidamente autentificadas que solicitaban una consulta ciudadana para decidir sobre la cesión o no de Illunbe como sede de espectáculos sangrientos.
El alcalde Goia simuló recoger el guante y puso como fecha para la consulta el 19 de febrero del 2017, pero esta vez la maquinaria del Estado del PP se puso en marcha y, primero, rechazó el Reglamento Municipal de Consultas, aprobado en pleno incluso por el PP donostiarra, y, posteriormente, en Consejo de Ministros, no aprobó, vamos, prohibió, dicha consulta.
Ante tal “golpe del Estado” a la autonomía municipal y a la libre decisión de los donostiarras, Goia declaró que “estudiarían otras vías para que los ciudadanos puedan manifestar su opinión” (febrero de 2017).
Mientras Goia y su gobierno “estudiaban”, 50 toros fueron matados en la instalación municipal de Illunbe este verano.
Llegados a este punto, desde Eguzki, dos reclamaciones al gobierno municipal:
1- Es momento de poner en marcha la consulta ciudadana sobre los usos de Illunbe. Y si no se atreven a convocar una consulta, pongan en marcha mecanismos de participación similares (pero con garantías) al de la concesión del Tambor de Oro, por ejemplo.
Pero, por favor, que se pregunte.
2- Y mientras tanto, proceder a declarar una moratoria en la concesión del uso de Illunbe como recinto para matar toros.
El Ayuntamiento intuye cuál es el sentir de l@s donostiarras con respecto a estos sangrientos espectáculos, y lo que no puede hacer es parapetarse en los “burladeros jurídicos”, ahora que no existen, para no tomar una decisión valiente y democrática.
Donostiako EGUZKI
